lunes, 1 de agosto de 2011

El día y la noche:


En China, hace miles de años atrás, el Señor del Cielo vio que los
días y las noches transcurrían iguales, y decidió hacer una gran
bolsa de luz para que diera alegría y esperanza a los hombres. Así,
comenzó a existir el Sol.
Pero la Noche se sintió triste al quedarse siempre oscura. Entonces,
el gigante Ti-Nu, que era amigo de la Noche, quiso consolarla. Ti-
Nu tenía unas manos enormes y fuertes, con ellas alcanzó el Sol y
le robó un gran pedazo, que guardó en un saco.
Ti-Nu huyó corriendo y en su carrera se rompió el saco, que fue
desparramando en el cielo pequeños pedazos de luz. Esos pedazos
de luz son las estrellas que vemos ahora.
Cuando Ti-Nu llegó donde su amiga la Noche, abrió el saco, pero
ya no estaba el pedazo de Sol, sino una gran bola blanca: ¡la Luna!
Así la Noche nunca más estuvo sola y los hombres nunca se quedaron
completamente a oscuras.
Leyenda tradicional china.